El uso del teléfono móvil está modificando los hábitos de los consumidores. En este sentido nació Cabify, una«start-up» española que ha revolucionado el sector del transporte por la ciudad. Fundada en 2011, ya lleva más de cuatro años ofreciendo a sus clientes un transporte cómodo, seguro y con muchas facilidades. El servicio consiste en que el usuario solicita a través de la aplicación móvil o sitio web un vehículo con conductor, que le llevará hasta el lugar de destino que haya indicado por un precio estimado conocido de antemano.
La idea surgió a raíz de que su fundador, Juan de Antonio, se dio cuenta al viajar con frecuencia, sobre todo por países emergentes, de los problemas que conlleva en ocasiones el uso del taxi. Malas experiencias con el idioma, situaciones en las que el conductor se aprovechaba del desconocimiento de la ciudad por parte del cliente, problemas al no llevar dinero en efectivo, entre otras situaciones, provocaron que este emprendedor diera con la solución.
Así, decidió crear esta empresa emergente, y encargarse de que la calidad estuviera presente en todo momento en el servicio, no solo a través de vehículos en perfecto estado, sino priorizando también el trato del conductor hacia el cliente. En este sentido, Juan Ignacio García-Braschi, Country Manager de Cabify España, explica la importancia que la empresa le da a la actitud del conductor, ya que «al finalizar el trayecto el cliente puede dar una valoración de hasta cinco estrellas, y si esta es menor de cuatro, el sistema de calidad de la empresa interviene, contactando tanto con el cliente como con el conductor, e incluso ofreciendo compensación si el caso lo merece».
Expansión internacional
Cabify no solo se encuentra disponible en España, sino que su presencia se alarga a países como Chile, Perú o México, y desde hace poco tiempo también Colombia. En el caso de nuestro país, opera sobre todo en Madrid, donde al solicitar un vehículo se puede tener en la puerta en diez minutos, aunque se encuentra también disponible en otras ciudades como Barcelona, Valencia, Málaga o Bilbao, donde funciona con reserva previa.
Sin embargo, y aunque atiende cada vez a más particulares, su público principal son las empresas, tal como explica García-Braschi. Esto se debe a las herramientas adicionales que este servicio ofrece cuando los clientes son las empresas, «como el pago a 30 días, la recuperación del IVA o los límites al tipo de servicio de cada empleado, como por ejemplo la limitación de horarios», afirma el Country Manager.
Empresas como FCC o Securitas Direct, entre muchas otras, ya han sustituido sus servicios de alquiler de coches y chófers por Cabify, según confirma García-Braschi.
Una de las principales ventajas que ofrece son sus precios competitivos respecto a otros métodos de transporte por ciudad. En ocasiones, la utilización de este servicio puede suponer un ahorro de hasta un 40%, según afirma García-Braschi. «Por ejemplo, se puede viajar desde Cibeles hasta el Aeropuerto de Barajas por unos 21 euros, mientras que la tarifa estándar que tienen los taxis para ese trayecto es de 30 euros», explica.
Licencias VTC
En cuanto a la legalidad del servicio, desde la empresa quieren resaltar que «todo se adapta al marco regulatorio de cada país». En el caso de España, los conductores operan con licencias VTC (autorización de arrendamiento de vehículos con conductor), por lo que se encuentra en el marco legal.
Actualmente, cuenta con 300.000 descargas de su «app» a nivel mundial, de las cuales aproximadamente la mitad son usuarios activos. En concreto, en Madrid, Cabify ocupa ya el 40% del total del sector de arrendamiento de vehículos por conductor, y cuenta con alrededor 4.000 conductores, por lo que, según García-Braschi, ha sido «un motor de generación de empleo».
En definitiva, se trata de una empresa innovadora que pretende ir más allá y ofrecer unos servicios alternativos que no se encuentran a la hora de utilizar otro tipo de servicio de transporte por ciudad.
Fuente: ABC
Ver también: “Gabify tambien se juega su futuro en los tribunales”, en el País: El pais