Somos criaturas musicales de forma innata. Probablemente la música sea una de las formas más eficaces de impactar en nuestro cerebro y también en nuestro corazón. La música es un lenguaje universal que trabaja a un nivel más simbólico que explícito. Las sutilezas que expresa las puede entender todo el mundo. Nos permite cambiar nuestras percepciones, hacernos sentirnos mejor, peor, más animados o más tristes. Una canción, un ritmo o una melodía pueden condicionarnos enormemente a la hora de tomar decisiones, así como condicionar en el terreno del marketing.
De este modo, disponer de una identidad sonora puede ser la clave del éxito de una marca. Cada día hay más marcas que se dotan de ella. El uso estratégico del sonido para diferenciar positivamente una marca, provoca un vínculo emocional con el cliente, mejora su recuerdo, genera preferencia, crea confianza y en última instancia aumenta las ventas.
El diseño musical constituye una apuesta identitaria para la imagen de marca, de la misma manera que lo hace una carta gráfica. La identidad sonora se debe aplicar a todos los puntos de comunicación de una empresa garantizando así la coherencia, la continuidad y la consistencia de sus expresiones.
Hay varios motivos por los cuales debemos apostar por el audio branding, el primero es que prestamos menos atención que antes y somos menos constantes. La saturación de imágenes e información a la que estamos sometidos en la actual revolución de la tecnología y las redes sociales han hecho que veamos sin mirar. Cada día hay más puntos de contacto sonoro y por lo tanto más oportunidades. Con un audio logo o logotipo sonoro logramos escuchar y retener sin tener que obviar otra información; si el sonido es memorable lo interiorizaremos fácilmente. Las marcas deben procurarse una identidad sonora original y única que refleje los valores y aportaciones de la empresa de forma auténtica.
El audio branding permite captar la atención del cliente y que éste se quede con el papel que juega la marca en su vida. Las comunicaciones de marca gracias a una música adecuada pueden transmitir mejor su personalidad, sus valores, su filosofía y sus compromisos. Sin la marca en el corazón, estas comunicaciones son como una balsa a la deriva. La marca es el ancla, que perdura y crea coherencia.
Ramon Vives, director general Sixième Son Spain
Fuente: MarketingNews