Amor, Sexo y Porno

Los datos sobre el consumo de pornografía en menores preocupan a padres, educadores y políticos. ¿Cómo afecta este consumo en los adolescentes? ¿Qué visión de la sexualidad les está llegando? ¿Cómo influye eso en sus relaciones personales? ¿Es posible proponer una alternativa?

Hay toda una generación de jóvenes y adolescentes que han crecido con el porno a un click de distancia. Estos contenidos, encontrados a veces sin querer a edades muy tempranas, configuran la visión del sexo y de las relaciones sentimentales en una etapa muy vulnerable.

Proyectos como Fight the new drug en Estados Unidos, The Ligh Project en Nueva Zelanda o Dale una vuelta en España arrojan luz sobre la dimensión del problema del consumo de porno en menores (y en adultos), y cuáles son sus consecuencias en la vida afectiva y sexual. Las tres apuestan por repensar la manera en la que concebimos el sexo en la sociedad moderna.

Los datos sobre el acceso al porno por parte de los menores están ya en todas partes. Los estudios sitúan la primera edad de contacto antes de los 13 años, aunque casi uno de cada diez llega a él antes de los 10, según el informe de Save the Children.

El contenido que ven los menores no es solo sexualmente explícito, sino que también es machista, violento y mete a los adolescentes en unos auténticos agujeros negros en los que el nivel de agresividad no hace más que aumentar.

Todo ello distribuido de manera masiva entre los canales donde los menores están presentes, como las redes sociales o los chats de mensajería, o a tiro de una sencilla búsqueda en internet.

Jorge Gutiérrez Berlinches, director e impulsor de Dale Una Vuelta, lo explica así: “antes el fútbol era gratis y la pornografía estaba codificada, y ahora la pornografía es gratis y el fútbol está codificado”.

Todo el mundo está de acuerdo en que es necesario educar mejor a los jóvenes de la “generación porno”. Sin embargo, aquí acaba el consenso, porque todo lo que sea ir más allá (preguntarse en qué tiene que consistir esa educación, quién y cómo se imparte) es un campo de minas que polariza y divide…

Además del propio Gutiérrez Berlinches, en Aceprensa a fondo se ha hablado de esta cuestión con Blanca Elía, psicopedagoga y educadora afectivo-sexual, Carola López Mota, psicóloga, y Nuria Coronado, periodista.

El texto anterior es un extracto del servicio:

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