La noticia corre por las redes sociales, por mensajes, por todos sitios: WhatsApp comenzará a cobrar algo menos de un euro anual por el uso de esta aplicación en teléfonos Android, Windows Phone o Blackberry, smartphones para los que su descarga era gratuita. ¿Qué estrategia de precios está siguiendo WhatsApp?
Una de las estrategias de precios más utilizadas por las empresas es la del precio cautivo. Esta estrategia consiste en lanzar un producto o servicio a un precio muy bajo, o incluso gratis, para después vender partes o complementos a precios considerablemente altos. Esta estrategia la utilizan muchas empresas; por ejemplo las máquinas de café Nespresso son proporcionalmente más baratas que sus cápsulas. Lo mismo le ocurre con las impresoras y sus cartuchos y tonners, los cepillos de dientes eléctricos y sus cabezales, o las maquinillas de afeitar y sus cuchillas.
La eterna polémica de si WhatsApp es gratis o no ha reabierto el debate de los modelos de negocio en el mundo de las aplicaciones. Atendiendo a la cantidad que la compañía pide a cambio por utilizar su servicio parece razonable realizar el desembolso de la aplicación. Menos de 1 euro al año, algo que se amortizaría con tan solo dos mensajes de texto tradicionales. Esa cantidad es diez veces menos de lo que cuesta una copa en un bar o menos que el billete de metro. Ese dilema está en si pagar por un servicio adaptado a las necesidades de los usuarios o no, dada la existencia de alternativas gratuitas.
En la película «La red social» se mostraba -de forma fictícia- la celebración del primer millón de usuarios conseguido por Facebook. Esa cifra es la línea ansiada y añorada por todo emprendedor que se precie. Pasito a pasito Spotbros, conocido popularmente como el «WhatsApp español», ya ha conseguido sumar esta cantidad (un millón) de usuarios. Y lo ha hecho en tiempo récord.
¿Estarías dispuesto a pagar por utilizar WatsApp? ¿Utilizas alguna aplicación alternativa?