La propia Wikipedia nos
ilustra sobre este término sobradamente conocido.
 La Pereza, del latín: acedia,
accidia, pigritia. A pesar de sus múltiples definiciones, comúnmente se la conoce también como gandulería,
flojera, haraganería, holgazanería,
 entre
otros términos que pueden incluso llegar a ser peyorativos.

Todos los seres vivos que se
mueven, tienden a no malgastar energías si no hay un beneficio, que no tiene
por qué ser seguro e inmediato. Incluso a
las personas que evitan realizar cualquier actividad de las cuales el beneficio
no sea de esta forma inmediata, suelen ser calificadas como vagos o
perezosos
No hacen falta muchas más
explicaciones para entender las connotaciones de la pereza como esa falta de
disposición para realizar determinadas tareas también bajo determinadas
circunstancias o hábitos que nos hacen convertirnos en personas mucho más
cómodas. Sin embargo, si podemos
pararnos a reflexionar, cómo estos comportamientos están influyendo
directamente en otros hábitos y tendencias.

En plena era de los social media y de la Internet más
global, el comercio
electrónico ha superado su grado de ebullición para transformar la forma
en que los consumidores realizan muchas de sus compras
. Y es aquí donde la comodidad termina por…
Sigue leyendo y pincha en los enlaces…

…convertirse en pereza. 


Durante todo este año, hemos descubierto muchos de los datos, informes y
estudios que nos relevaban el papel emergente del comercio electrónicoLas
previsiones para las pasadas navidades nos muestran como las compras online experimentarán
nuevamente un notable crecimiento,
 impulsadas
también por el uso creciente de los actuales dispositivos móviles. Estos
dispositivos han revolucionado el comercio electrónico y la forma de comprar de
los consumidores. Ahora las compras pueden realizarse en cualquier
momento y desde cualquier lugar. 
Una
serie de comodidades que terminan convertidas en esta especie de
«pereza» que termina por convertirse  y dar paso a otros hábitos
sedentarios como el e-Sofing.

Recientemente, un estudio
desarrollado por Verdit
,  ponía de manifiesto la dependencia por
estos dispositivos en el día a día de los consumidores online. Según el propio
informe, 2 de cada 3 clientes
compra desde el salón de su casa. 
Para
ellos, especialmente para los consumidores con edades comprendidas entre 35 y
54 años, comprar online es una
experiencia mucho más satisfactoria que ir de tiendas, un concepto que se
agrava en el caso de los hombres.
Estos datos y nuevos
hábitos reflejan cómo estas nuevas facilidades y comodidades ha dado paso a la
pereza del consumidor 
que cada día más, prefiere realizar sus compras sin moverse
del sitio y sin la necesidad de salir a callejear o visitar determinadas
tiendas físicas. y cómo hábito, estos comportamientos cada vez más extendidos y
repetidos regularmente, terminan por asentarse en las costumbres de una
sociedad. Pero a su vez, también
suponen no solo una amenaza y un gran perjuicio, sino, también todo un reto
para el comercio tradicional
.
Si todo esto pudiera sonar
poco convincente, de las pretensiones de empresas como Amazon mejor ni hablar. Según el presidente de
la compañía, Jeff BezosAmazon podría comenzar a entregar
paquetes vía drones o aviones no tripulados en no más de
cinco años.
 Y aunque para
muchos este anuncio pudiera tratarse más de una campaña de marketing que
cualquier otra cosa, puede servir para hacernos una idea como el futuro del
comercio y las compras apunta cada
vez más a ofrecer determinadas ventajas y comodidades al consumidor,
 que quedará atrapado tras las puertas
de su propia casa.

Ante cuestiones como ¿Cerrarán
sus puertas los comercios tradicionales en 15 años? 
Cada día surgen más hipótesis y teorías sobre
el futuro del comercio tradicional. Lo que sí es evidente y toda una realidad,
es que la pereza se ha
instaurado en el día a día de los consumidores, 
y lo que parece hacernos una vida
más fácil puede terminar por extinguir los hábitos de antaño y con ellos muchos
de los comercio más tradicionales. Visto de esta manera, la Pereza, se ha convertido en el
peor enemigo del comercio tradicional y en el mejor aliado del comercio
electrónico.
Sin embargo, a pesar del
gran avance del comercio electrónico, que también deberá de madurar y seguir
evolucionando, los
comerciantes de a pie de calle todavía tienen la oportunidad de afrontar este,
como uno de sus grandes retos.
 Para
ello deberán de contrarrestar las comodidades y ventajas que alimentan nuestra
pereza, motivando al consumidor a salir y visitar sus establecimientos
comerciales de forma creativa e ingeniosa, sin olvidar que deberán existir
siempre beneficios para compensar tales esfuerzos.
¿Y tú? ¿Te consideras ya un
consumidor cómodo y perezoso?