“Padre y madre en la sociedad woke”: Una defensa de la diferencia y la complementariedad
En un tiempo en el que los discursos sobre la familia, el género y la educación se ven cada vez más condicionados por ideologías contemporáneas, el libro Padre y madre en la sociedad woke, escrito por la jurista y ensayista María Calvo, emerge como una propuesta clara y firme a favor de la diferencia sexual y la complementariedad de los roles paternos y maternos.
El contexto woke y su impacto en la familia
La autora parte de una crítica al fenómeno cultural conocido como ideología woke, que se caracteriza, según ella, por una visión igualitarista radical que tiende a borrar las diferencias naturales entre hombres y mujeres. En este nuevo paradigma, la identidad sexual ya no se considera una realidad biológica, sino una construcción social o incluso una elección individual, lo cual, para Calvo, pone en jaque la estructura y misión natural de la familia.
Este planteamiento cultural, argumenta, no solo cuestiona la institución matrimonial y el papel tradicional del padre y la madre, sino que también diluye los referentes que todo niño necesita para desarrollarse con seguridad emocional, identidad y equilibrio psicológico.
La figura del padre: una necesidad silenciada
Uno de los ejes del libro es la reivindicación del rol del padre. María Calvo denuncia lo que llama la “desaparición simbólica del padre” en la narrativa moderna, relegándolo a un papel irrelevante o incluso tóxico. Frente a ello, sostiene que la figura paterna tiene una función insustituible: representa el principio de ley, de límite, de seguridad y de apertura al mundo exterior.
El padre —afirma— no compite con la madre, sino que la complementa. Mientras la madre suele proporcionar apego, consuelo y nutrición emocional, el padre introduce al niño en la realidad externa, promoviendo la autonomía y el desarrollo de la identidad.
La madre: custodio del vínculo primario
Lejos de contraponerlos, Calvo subraya que el rol materno es igualmente esencial. La madre es presentada como figura de acogida, ternura y protección, especialmente importante en los primeros años de vida. Es el primer espejo donde el niño aprende quién es y cómo amar. La maternidad, desde esta perspectiva, no es un obstáculo para la realización femenina, sino una de sus expresiones más plenas.
La complementariedad como riqueza
Uno de los mensajes centrales del libro es que hombre y mujer, padre y madre, no son roles intercambiables ni opuestos, sino complementarios. Esta diferencia no implica desigualdad, sino una riqueza que nutre el desarrollo infantil. En la familia basada en el amor mutuo y en el respeto a las diferencias, los hijos encuentran un equilibrio que los prepara para la vida adulta.
Una propuesta valiente en un tiempo confuso
Padre y madre en la sociedad woke no es un alegato nostálgico por volver al pasado, sino una propuesta que invita a recuperar el valor de la diferencia entre los sexos como base para construir familias sanas y estables. María Calvo no pretende imponer un modelo rígido, sino advertir sobre las consecuencias de eliminar cualquier distinción entre lo masculino y lo femenino.
Con un estilo claro y argumentado, y apoyada en estudios de psicología evolutiva, antropología y derecho, la autora ofrece una mirada alternativa a la tendencia dominante, en defensa del sentido común y del bienestar infantil.