Desde que Netflix llegó a nuestro país ha tratado de diferenciarse de sus competidores y consolidarse como una alternativa a la televisión tradicional. Y lo ha logrado con dos estrategias: ofrecer producciones de calidad por un precio muy bajo y por arriesgar con innovadoras campañas publicitarias.

Si hace unos meses ya llenó el centro de las capitales de España con carteles de «Se Busca» y la cara de Pablo Escobar, protagonista de su serie estrella «Narcos», ahora apuesta por un formato más grande. Un cartel gigante con la cara del famoso narcotraficante. El texto, además, juega con el doble sentido de la sustancia que tanto dinero le hizo ganar a Escobar. «Oh, blanca Navidad», se puede ver escrito en clara alusión a la cocaína.

¿Violencia o genialidad? ¿Insultante o sublime? ¿Intolerable o legendaria? El mes de diciembre ha llegado con polémica a la capital de España con este cartel publicitario.

Pues bien, como también era de esperar, la polémica no ha tardado en saltar, como es habitual, a través de redes sociales. En dos bandos bien diferenciados, se han posicionado quienes han aplaudido la iniciativa, y de paso han recomendado la serie a quien aún no la haya visto. Y por otro, están aquellos que no dan margen al humor o a la chanza, y consideran indecoroso e intolerable que se use una metáfora como ésa para felicitar la Navidad. Polémica servida.

Y claro, si en un sólo día, el cartel ya ha generado debate, sólo queda coger al equipo de publicidad de la empresa, y darle un abrazo porque han conseguido su objetivo, que se hable de ellos.

Marta Santelesforo, alumna de Marketing de Servicios

Fuente: ABC